Caimanes de Barranquilla sufrió este miércoles una delicada derrota por 3-1 ante los Vaqueros de Montería en el estadio Édgar Rentería de barranquilla, en un juego donde su bateo fue completamente anulado por el trabajo del abridor Edison Frías por espacio de siete entradas. 

Con este resultado el equipo barranquillero quedó al borde del precipicio, pues de perder este jueves el quinto juego, quedaría sentenciado el título para los monterianos. 

La victoria fue para Edinson Frías y la derrota la cargó Édgar De la Rosa. El juego salvado correspondió a Severino González. 

Caimanes se fue arriba en la tercera entrada, cuando Sandy León abrió la entrada despachando un doble a las profundidades del jardín derecho y se estacionó en la intermedia a esperar el remolque, mismo que llegó con un doblete a la derecha del sanandresano Tito Polo para abrir la pizarra. 

Sin embargo, la ventaja no duró mucho tiempo. En la tercera entrada los monterianos lograron fabricar tres anotaciones para darle un vuelco completo a la pizarra. 

El venezolano José Brizuela pisó el plato para el empate, gracias a un sencillo de Brallan Pérez. Acto seguido, Rubí Silva llegó a consumir su turno con dos hombres en las bases, despachando un triple que llevó a la registradora a Milton Ramos y al mismo Pérez para el 3-1. 

Los sinuanos pudieron multiplicar su ventaja en la cuarta entrada, cuando llenaron las bases sin outs. Pese a ello, el zurdo Ronald Ramírez llegó para apagar el incendio al lograr un cero grande para mantener en la pelea a los ‘reptiles’. 

Para eso, Caimanes tenía que romper el dominio que tenía sobre ellos Edison Frías, que no les permitía imparable desde la tercera entrada. El encargado de terminar esa racha fue Harold Ramírez con un doble a la izquierda en la séptima, pero aun así se quedó esperando el batazo impulsador. 

Caimanes contó con grandes relevos para mantener la diferencia en contra de dos anotaciones, con el mismo Ramírez y luego un inspirado de Jhon Romero que retiró dos entradas sin permitir ni un imparable. 

Y luego, para dar oportunidad para el último cartucho en el noven capítulo, el estadounidense Jalen Miller tiró una entrada donde retiró en el orden a los tres bateadores que enfrentó. Y es que el bullpen de los barranquilleros no permitió imparables a los cordobeses desde la cuarta entrada. 

Para salvar el juego, el elegido fue Severino González. El lanzador empezó la faena ponchando a Tito Polo, retirando con una roleta a segunda a Dilson Herrera y luego admitiendo imparables de Harold Ramírez y Audy Ciriaco, es decir con el empate corriendo la primera en las piernas del emergente Édgar Barrios. 

La responsabilidad de mover a los corredores recayó en Jonathan Gálvez, que no pudo ante los envíos de González, quien lo ponchó abanicando para colgar el out 27 del partido. 

Por Caimanes, Harold Ramírez de 4-2 con un doble. 

Por Vaqueros, Rubí Silva de 4-1, con un triple y dos empujadas. 

Caimanes volverá a la acción este jueves, a las 8:00 de la noche, para el quinto juego de la final.